Alierta y Gallardón

Acabo de ver a César Alierta alucinando en la televisión. Porque telefónica es una mafia y va bien, ese iluminado, se cree que todo lo demás no va tan mal como se dice y piensa que vamos a salir de la crisis antes de lo previsto. ¿Es que no se entera de lo que pasa? Se parece al presidente de la patronal de hace unos años, cuando decía que había que dejar venir a más inmigrantes, porque hacía falta más mano de obra; se olvidó de añadir barata. Otro tema que me indignó fueron las declaraciones del hijo de papá, Gallardón, al asegurar que endurecerán las leyes para los reincidentes en los delitos sexuales. Pues bien, señor Albertito; comienza por meter en la cárcel a todos los religiosos españoles que se han pasado toda la vida diciéndole a los niños y niñas, que el sexo era pecado y luego se aprovechaban de ellos sexualmente. ¡Qué poca dignidad y poca vergüenza! Ellos, que por su formación y cultura, deberían ser los seres más evolucionados de la sociedad, son peores que los animales. Y si se te ocurre castigar a las mujeres que desean abortar, ¿no lo harás, porque todas las mujeres ricas y peperas del país pueden ir a abortar al extranjero, como lo hacían durante la dictadura? Incluso algunas de ellas, las más jóvenes y putas, regresaban con el himen remendado. ¿A quien queréis engañar con vuestra hipocresía? Tenéis suerte de que el pueblo sea tan ignorante. Todo gracias a vosotros.