Tengo unas preguntas para ustedes

Conociendo de antemano las respuestas a las preguntas que les harán hoy los cuidadanos de Catalunya a nuestros líderes, no pienso perder el tiempo escuchándoles ni viéndoles, porque ya están demasiado vistos.

Yo sí tengo varias preguntas para ellos:

¿Por qué tienen ustedes unos salarios que triplican a los de los trabajadores normales, si el kilogramo de patatas vale lo mismo en Huelva que en Girona y lo mismo al rico que al pobre?

¿Por qué tienen tantos asesores y consejeros con sueldos astronómicos, con la que está cayendo?

¿Por qué necesitan estar rodeados de tantos correveidiles y lameculos inútiles?

¿Por qué son tan vanidosos y egocéntricos, si son tan cortos y no pueden solucionar los problemas que ustedes mismos crean con su ineptitud?

¿Por qué no les meten caña a los especuladores de la bolsa, a las entidades financieras y los que no saben qué hacer con tanto dinero?

¿Por qué no obligan a los propietarios que tienen tantas viviendas vacías a alquilarlas a la mitad de lo que lo hacen, que sería lo justo; si la Constitución dice que todos los españoles tienen derecho a una vivienda digna?

¿Por qué no se reparte más el trabajo para que trabajen todos y no tener que mantener subsidiados a tantos millones de parados? Hay varias fórmulas para conseguirlo.

¿Por qué hemos de tener tantas contemplaciones con los marroquíes?

¿Por qué no se van todos a tomar por el culo si no son capaces de hallar un nuevo sistema económico que no perjudique tanto a los trabajadores y beneficie tanto a los que se creen que no van a morir nunca?

¿Por qué no sigo? Porque no vale la pena perder más tiempo en tonterías.

Ha llegado la hora de apagar la tele y el ordenador y tumbarse en la cama, porque cuando lo que se ve en el mundo no es un sueño es mejor dormir aunque se tengan pesadillas.

CONSTANTE