El mundo está loco, loco

En los años 60 del siglo pasado alguien filmó una película titulada “El mundo está loco, loco”. En el caso de que los realizadores estén muertos, si levantaran la cabeza se volverían locos de verdad, viendo lo que ocurre ahora.
En la película se mostraba el contraste entre las aberraciones que cometían los ricos en comparación con las calamidades que sufrían los pobres. Transcurría la Guerra Fría y aún estaban relativamente cercanas las consecuencias de la Segunda Guerra Mundial, pero desde entonces se multiplicó por dos la población mundial y ahora estamos en un momento decisivo para que la clase trabajadora y los pobres de solemnidad decidan adónde queremos ir con esta gentuza que nos gobierna. Dirigentuza que sólo piensa en sus privilegios y en favorecer que los ricos sean cada vez más ricos, con lo que estamos retrocediendo a tiempos de la esclavitud.
Hace dos días hubo huelga general, pero participó mucha más gente en las manifestaciones convocadas en más de cien ciudades. Dejando al margen la representatividad y la eficacia de los sindicatos españoles, creo que todos los trabajadores de este desdichado país deberían aprovechar el Primero de Mayo, para volver a manifestarse masivamente y pararle los pies a este prepotente Gobierno. Si no lo hacen ya pueden ir invirtiendo sus pocos ahorros en las fábricas de vaselina, porque nos va a hacer falta en cantidad industrial en los próximos años, si no queremos que nos duela.

Huelga general

La huelga del 29-M toma como motivo más inmediato la agresión contra los trabajadores que significa la denominada “reforma laboral” de febrero de 2012. ¿Qué piensas de esa nueva contrarreforma?

“No es reforma laboral, es lucha de clases”, podríamos decir parafraseando el aforismo del 15M. La “reforma laboral agresiva” que susurraba De Guindos al oído de los capataces del Banco Central Europeo expresa a la perfección el tiempo que vivimos y el que viene. La burguesía sí tiene una nítida conciencia de clase, de la situación y de la correlación de fuerzas. Mientras que la izquierda y el sindicalismo mayoritario llevan años recitando la letanía del Estado del bienestar, el gran capital recuenta las fuerzas de cada uno y toma la iniciativa. La lucha de clases no se rige por criterios de caridad o compasión. La “globalización feliz” y el “capitalismo popular” se han terminado. La crisis sistémica (económica, ecológica, urbana, de equilibrios geopolíticos) obliga al capital a una reorganización que pasa, ineludiblemente por eliminar el poder real o latente de los antagonistas, por disciplinar la mercancía llamada trabajo, de dónde emana la valorización del capital. ¿Por qué habríamos de mantener el contrato social por el que suspiráis todavía si vosotros no tenéis la fuerza suficiente para sostener el pulso? Lo queremos todo y lo queremos ahora, vienen a decir.

“No es la reforma laboral, es el capitalismo”. Allá por 2002, algunos compañeros definían la globalización capitalista como el desbocamiento del capital. El desbocamiento de verdad lo estamos empezando a ver en los últimos años. “Cuanto más alto quieras llegar más cadáveres tendrás que dejar en la cuneta. Y es justo que sea así. La ley es la de los que son leones”. Son palabras de Terri de Niccoló, una de las prostitutas que participaba en las fiestas político-empresariales de Berlusconi, que expresa con una metáfora la filosofía mundana del capitalismo naturaleza. Caballos desbocados y leones que reclaman su derecho a comerse la gacela. Ese es el trasfondo de la contra-reforma laboral: todo el poder para el capital, nueva acumulación de capital a partir de la desposesión de derechos laborales.
Los sindicatos mayoritarios, UGT y CCOO, sus direcciones quiero decir, hablan, lo han hecho en algún momento si no ando errado, de modificar los aspectos más lesivos de la ley. ¿Este debería ser uno de los objetivos centrales de la movilización del 29M?
Muchas veces sonroja escuchar a los dirigentes del sindicalismo de concertación. Frente a una contrarreforma que no deja títere con cabeza y arrambla contra todos los derechos, dicen que quieren corregir (Méndez) y enmendar (Toxo) la reforma laboral. Tienen bastante más miedo que vergüenza. A pesar de la brutalidad de la agresión, siguen afiliados al “virgencita que me quede como estoy” y a la nostalgia del pacto social permanente.

La extendida desconfianza hacia las direcciones sindicales no es el producto de una conspiración de El Mundo. Basta con recordar el papelón que han hecho en tres de los momentos cruciales desde que se inició la crisis. Callaron -y cuando hablaron fue para justificarlo- mientras se saqueaban los fondos públicos para rescatar a los bancos. El segundo gran episodio que demostró la falta de firmeza fue el pensionazo: cuatro meses después de la huelga general del 29 de septiembre, dispusieron, junto al gobierno, que tendremos que trabajar dos años más para cobrar una pensión más exigua. Y la tercera “cantada” fue la meliflua protesta frente a la reforma constitucional que blindó el cobro de la deuda para los bancos.

Y ahora, es una insensatez situar la huelga general como respuesta únicamente a la contrarreforma laboral, aunque ésta sea gravísima. En un país con casi 6 millones de parados, tres veces más personas acogidos a los programas de alimentos de Cáritas que en el 2008, la degradación sistemática de los servicios públicos y con 150 desahucios y 10 suicidios diarios, la huelga debe desbordar el timorato planteamiento de las centrales sindicales mayoritarias. Uno de las fuentes de deslegitimación sindical es precisamente su empecinamiento corporativo, su economicismo de bajo vuelo. La huelga ha de ser general, es decir, radical, abarcadora, política.

Se habla –la CEOE por ejemplo- de que el “mercado laboral” español es poco flexible, que hay que flexibilizarlo más, que así no pueden surgir nuevos “emprendedores” y no “se crea empleo”. Toda esta jerga “político-economicista”, ¿qué significa para ti?
Las jergas casi siempre buscan o producen una zanja entre el experto y el lego. Para empezar, esa jerga convierte la economía en un lenguaje indescifrable. Es el pensamiento mágico de nuestros días: los brujos dicen que es así y así debe ser.
Y después está el propósito deliberado de edulcoración. Son las nuevas maneras de ocultar la explotación; es el capitalismo disfrazado de interés general. La palabra emprendedor, sustituyendo a la de empresario, resume bien el camaleonismo, la capacidad del capital para integrar los valores antagonistas. La palabra “emprendedor” toma el relevo de otra palabra prestigiada en su momento, la de “autónomo”. Frecuentemente, con ese término se ha puesto en pie la ficción de una figura híbrida, mezcla de empresario y trabajador que disfrazaba, en muchas ocasiones una relación salarial encubierta. Como entonces, el capital transforma los aspectos más superficiales de la crítica a la fábrica, a la extenuación laboral o a la rutina, en los atributos con los que caracterizar a la empresa. La empresa como emprendimiento, exploración, iniciativa…

Algo parecido es lo que ha hecho Mario Monti, el primer ministro italiano para referirse a la precariedad: "Los jóvenes tienen que acostumbrarse a la idea de que no tendrán un puesto fijo de trabajo para toda la vida. Por otra parte, digamos la verdad, qué monotonía tener un puesto fijo para toda la vida. Es más bonito cambiar y tener desafíos". La precariedad, que es justamente una cárcel móvil para el trabajo, es transformada en aventura, en libertad, frente a “la monotonía de la estabilidad laboral”.

¿Ves algún punto de ruptura entre la política laboral de PP y la que abonaron e impulsaron los últimos gobiernos del PSOE? Estos últimos afirman que ellos no cruzaron determinadas líneas rojas que siguen siendo sagradas.

Parece que tanto la política laboral como el conjunto de la política económica del PP y del PSOE comparten la misma lógica neoliberal y obedecen a los mismos amos. Las diferencias entre ambos son de ritmo, no de rumbo; de intensidad, pero en modo alguno de orientación. Si comparamos las reformas laborales de 2010 y 2012 comprobaremos que el despido y la negociación colectiva son dos piezas preciadas en ambas cacerías. Pero, sin duda, la reforma laboral de 2012 supone un salto cualitativo. Es una estrategia elaborada, un ataque articulado, un nuevo marco de relaciones laborales.
Por otra parte, la esquizofrenia del PSOE es ya proverbial: ortodoxos neoliberales en el gobierno y fervientes socialdemócratas al día siguiente de perder las elecciones. Este enrojecimiento súbito es ya una historia cansina, sólo apta para aparateros y chusqueros desesperados.

Creo que el 15M se sumará a las movilizaciones. ¿Debería el movimiento obrero componer o recomponer sus relaciones con ese movimiento? No siempre, según creo, sus relaciones son las organizaciones clásicas de los trabajadores son fluidas.
Es lamentable el desprecio con el que los sindicatos oficiales han tratado la movilización del 15M. En lugar de buscar una convocatoria que entroncase con la gran movilización de las plazas, se ha dedicado a tildar de infantil y ambiguo al movimiento indignado. Bastaría con recordar algunos de los lemas que se exhibían en las plazas y acampadas para darse cuenta de que el 15M no se puede despachar con la etiqueta de “interclasista”: “Manos arriba, esto es un contrato”; “Sin curro, sin casa, sin pensión, sin futuro”; “Violencia es cobrar 600 euros”; “No somos mercancías en manos de políticos y banqueros”.

Se ha utilizado reiteradamente como metáfora del 15M el cuento del emperador desnudo. El problema es que el insolente niño que ha ocupado las plazas durante 2011 no sólo ha señalado la desnudez y corrupción del poder político, sino que también ha interpelado, aunque no se lo propusiera, al sindicalismo de concertación. Señalaba su complicidad en los años de crisis, indicaba las limitaciones del sindicalismo mayoritario en relación a amplios sectores de trabajadores precarizados, jóvenes y no tan jóvenes.

Hace unos días Iñaki Gabilondo presentaba su colaboración en El País con un significativo título: “Precariato”. La precariedad toca ya la puerta de los que aún conservan algún derecho. Se conmueven y tocan a rebato. Pero desde hace más de 10 años el debate sobre la precariedad era materia cotidiana en el movimiento antiglobalización o en el sindicalismo crítico. Bertinotti, el dirigente de Rifondazione Comunista de Italia, llegó a hablar del movimiento antiglobalización como el nuevo movimiento obrero, expresión del precariado. Al final, hasta los que soñaban con desempeñar tan ricamente su papel de clase media-colchón social de por vida, hasta esa fantasiosa nueva clase trabajadora propietaria acaba entendiendo a qué nos referíamos cuando hablábamos de tiempos precarios, de régimen precario.
Claro que tampoco en el 15M es oro todo lo que reluce. Claro que hay, a veces, demasiado ciudadanismo, demasiada fe en el performance, demasiado Keynes y demasiado Punset. No, todo no se arregla con abrazos colectivos e inteligencia emocional. Se dio un giro social, de la exigencia de reforma electoral a los desahucios y las expulsiones de inmigrantes. Pero hay que profundizar esa orientación.

Hace falta una nueva alianza que sea capaz de unir las plazas, las empresas y los barrios; los precarios, los bastiones de trabajadores con derechos y los pobres. Hace falta un nuevo movimiento obrero, capaz de integrar los indignados, el sindicalismo crítico y la rabia de los barrios excluidos.

Refuta este argumento: en Grecia han hecho en estos dos últimos años más de 15 huelgas generales y mira lo que han conseguido: nada. Así que: a currar o a asaltar los cielos en serio.

Para empezar, en lugar de esperar a que los griegos nos saquen las castañas del fuego, arrimemos el hombro. Es como el esquirol que, en lugar de hacer huelga, te echa en cara que no has conseguido nada haciéndola tú.

La situación griega viene de camino. Y no quedará más remedio que plantar cara. La lucha siempre rinde frutos, aunque a veces no sean visibles. Los cuatro derechos que tenemos se han conseguido mediante la lucha obrera, no son la regalía de ningún político. Y, como decía mil veces Marcelino Camacho, los derechos que no se defienden, se pierden.

Luchemos como si estuviésemos preparándonos para asaltar los cielos. Y sobre todo, escribamos en las paredes y en los blogs la advertencia certera: Si luchamos podemos perder, si no luchamos estamos perdidos.

¿Cómo deberíamos continuar? ¿Qué hacer tras el 29-M?
La lucha va a ser muy larga y hace falta una estrategia de alcance. La huelga general ha de ser un instrumento de acumulación de fuerzas, tanto si consigue derrotar la reforma laboral como si no lo consigue. Hay que trabajar por un frente amplio, por una conjunción de fuerzas, por la construcción de un movimiento socio-político, es decir de un desafío consciente y sostenido al neoliberalismo.

Recibido de un amigo.

Presidentes ridículos

No sé por qué nuestros presidentes tienen tanta obsesión por hablar o ser saludados por el presidente americano de turno.
Le pasó a Felipe González con Reagan, con Bush padre y con Clinton; a Aznar con Clinton y Bush hijo; a Zapatero con Bush y con Obama y hoy se repitió la historia en Corea con Rajoy. Ni que Obama fuese Baltasar, el rey negro. Desde luego tiene que sentirse como el rey del mambo a ver como intentan todos lamerle el culete, cuando le quedan cuatro telediarios. Puestos a elegir, me gustaría que continuase él, que no es tan bélico como los presidentes republicanos. De los aspirantes de este partido me encantaría que venciera Santorum (de los Santos), porque tiene cara de más venerable que Rooney, aunque luego sean todos iguales de manipulables por la industria armamentista y otras multinacionales, pero no caerá esa breva, pues casi siempre ganan los que menos se lo merecen. Es lo que hay.

Mientras escribo estoy escuchando el partido y a juzgar por el pobre resultado ante un equipo tan mediocre, creo que el Madrid no merece ser el vencedor del campeonato, aunque puede serlo, porque todos los impresentables tienen suerte.

Pujolandia

En mi primer libro dediqué unas páginas al déficit fiscal de Catalunya y a lo interesante que sería para nosotros la independencia. Transcurría la interminable etapa del senior Pujol, tiempo en el que ni por asomo se le ocurrió plantear lo que propone ahora la coalición gobernante.
Llegaron al poder contra todo pronóstico, gracias al Partido Andalucista que se presentó a las elecciones autonómicas de 1980 y le robaron muchos votos al PSOE y al PSC, que habían ganado por mayoría las elecciones generales en Catalunya en el 77 y el 79. Cuatro años más tarde, gracias a “la jugada indigna a Catalunya”, por parte del Gobierno central, contra los dirigentes de Banca Catalana, obtuvieron mayoría absoluta y casi se perpetuaron en el poder, creyéndose Pujol el dios de Catalonia. Es decir: Pujolandia. Pero como nada es para siempre, tuvieron que pasar casi ocho años por la oposición y gracias a la ineptitud de los dos tripartitos, volvieron al poder por la puerta grande.
No me creo del todo que estén convencidos de alcanzar la independencia de Catalunya, pues es difícil, perteneciendo a Europa. Pero intuyo que su estrategia es hundir en la miseria de una vez por todas al único partido que realmente tiene historia en Catalunya. Como los dirigentes inútiles actuales de Esquerra Republicana han prescindido de Joan Ridao, el mejor dirigente que tuvieron en toda su historia, “Conveniencia” y Unió aprovecha la avinentesa para ocupar estratégicamente su ideología y su espacio político y que esta formación sea sólo testimonial para nostálgicos en el futuro.
Con la elección de Oriol Pujol como Secretario General de “Conveniencia”, temo que será la continuación de la dinastía, en cuanto Mas tenga que dejar paso a gente más joven dentro de cuatro u ocho años.
En treinta años de democracia pasaron a la historia todos los políticos de Catalunya que coparon el poder político y económico al frente de numerosos partidos, desde la extrema izquierda hasta la extrema derecha. Lo peor es que los de ahora son más inútiles que los de antes y habrá que engordarlos para que no les falte de nada mientras vivan y sean luego los más ricos del cementerio.
Con o sin independencia. ¡Visca Pujolandia lliure!

¡Olé Andalucía!

Lamento que en Asturias no pueda gobernar la izquierda y me alegro de que en Andalucía no pueda gobernar la derecha.
Vistos los resultados en las dos comunidades, sólo tengo que lamentar tanta abstención. Tanto cansa ir a votar de media una vez al año, cuando todos los andaluces están dispuestos a participar fanáticamente en otras actividades como El Rocío, las procesiones de Samana Santa, la Feria de Sevilla, los Carnavales de Cádiz y otros, los toros, el fútbol y un lago etcétera. Eso no cansa, ¿verdad?
Me alegro muchísimo de que Arenas se quede con las ganas de gobernar. La verdad es que no se lo merece. Qué le den por el culo, por chulo. Gana en diputados por muy pocos votos y un punto de diferencia, que eso también es importante. ¿Cómo se le quedará ahora la cara al candidato, a Rajoy y a la Cospedal? ¡Vaya trío de impresentables!
Ahora sólo hace falta que IU no se venda a la derecha como en Extremadura y que participe en el Gobierno y controle al PSOE, para que no se desmadre con vergonzosos casos de corrupción como hasta ahora, porque no se le puede dejar solo. A ver si han tocado ya fondo y comienzan la remontada, porque en manos del PP iremos de mal en peor.
Arenas, por tanto hablar de EREs, me he dado cuenta de que ERES gilipollas, por lo que tienes que quedarte donde mereces, en la Oposición.

Asturias Patria Querida

Hoy es día de reflexión, pero como los andaluces son muy listos, me dirigiré solamente a los asturianos, aunque sé que ninguno leerá este comentario.
Al emigrar tuve la suerte de conocer a gente de todas las regiones españolas y en los últimos años a ciudadanos de casi todos los países del mundo, llegando a la conclusión de que los asturianos son una raza especial, noble, trabajadora y honrada, de la que se puede uno fiar sin temor a ser traicionado. Afirmo esto, porque en casi cincuenta años no he conocido ni una sola persona asturiana que me haya decepcionado y no puedo decir lo mismo de algunos personajes inmigrados de otras comunidades.
Quien no recuerda que en Asturias comenzó la Reconquista contra los fanáticos que hoy nos quieren volver a invadir pacíficamente con muchísimo morro, o las huelgas salvajes de los mineros con dos cojones al final de la Dictadura, hace medio siglo. Es por eso que mañana me gustaría que ganara la izquierda en el Principado, para que IU colabore en el Gobierno, lo controle y no permita la corrupción. Espero que no caigan en el error de las otras comunidades y regiones, donde quieren ponerlo todo patas arriba para comenzar de nuevo como hace treinta años, tras lo que nos espera con los prepotentes que nos gobiernan ahora. Queridos asturianos, dadme una alegría mañana por la noche, por favor. Gracias.

¿Por qué escribo?

Tengo dos historias para publicar, pero no puedo hacerlo hasta que finalice la crisis, por eso escribo sentado para no cansarme esperando.
Hace hoy tres años comencé ha hacer comentarios en este blog, con algunos paréntesis porque tenía cosas más placenteras que hacer, y ya van 641, unas 740 páginas para un tomo de 1200 en libro. ¿Y por qué escribo si nadie me replica? Lo hago porque con la cantidad de medios de comunicación que hay ya ninguna editorial quiere editar libros con los resúmenes de las noticias de cada año o década. Estamos saturados de noticias, prácticamente todas malas, y mi intención es ir analizando lo que ocurre cada día para tener una visión retrospectiva y ver si acierto en mis planteamientos y visión de futuro.
Durante toda la Historia ha habido pensadores y científicos que descubrieron cosas maravillosas, que muchos años o siglos después fueron redescubiertas como novedad, cuando prácticamente todo son innovaciones de lo que ya hacían los genios de antiguas civilizaciones. También hubo escritores que se han anticipado al futuro, como Julio Verne, que sólo nos dejó buenas ideas. Pero fue el británico M. P. Shiel quien escribió en 1896 una novela titulada: Las S.S. en la que aparece una banda de monstruos criminales que asolan Europa, matan a las familias que consideran perjudiciales para el progreso de la Humanidad y queman los cadáveres en hornos. ¡Qué casualidad! Por aquel entonces ya existía la secta exotérica en la que se integró el paranoico Hitler, para intentar emular a Napoleón en cuanto Hindenburg le dio el poder absoluto tras el incendio del Reichstag. ¿No sería esa novela la que le dio a ese criminal la idea del Holocausto? Porque es muy fuerte lo que ocurrió y es increíble que aún haya gente hoy en día que lo niega.
Lo dicho, seguiré escribiendo para aprender, si no es demasiado tarde, ya que no pude hacerlo cuando tocaba, y para ver si doy en el clavo o no. Que tampoco importa mucho. Menos mal que a partir de ahora se va a acabar la corrupción en España, a juzgar por lo aprobado hoy en el Consejo de Ministros. ¡Estamos salvados!

¿Por qué todo va tan mal?

Hoy han liberado a un tal Óscar en Italia, después de dos años de errores de las policías española e italiana y la justa Justicia. ¿Cómo es posible que hayan tardado tanto tiempo en darse cuenta del error, cuando el jefe de Óscar testificó siempre que era un trabajador que no había faltado nunca ni un día al trabajo? ¡Qué vergüenza! ¿Cómo podía delinquir sin salir de su pueblo del Maresme?
Hace unos días que la señora Cospedal obligó a su marido a renunciar como consejero de una importante empresa, para que no se le viese el plumero, dado que ella es una de las políticas españolas que más cobra. Que le aproveche cuando se muera. Y hoy nos enteramos de que Telefónica también quiere contratar para sus servicios jurídicos al marido de la hermosa, demagoga, hipócrita, cínica y ambiciosa Soraya Sáenz de Santamaría, Vicepresidenta del Gobierno. No sabemos si ella se lo permitirá o no, pero si renuncia qué va a hacer el señor Zaplana sin compinches como él en la cúpula de la compañía, cuando en este país de subnormales más de mitad de la población se pasa todo el día enganchada al teléfono y donde hay infinidad de familias que gastan más en teléfono que en comer.
Hoy también supimos que se han entregado en el Congreso cerca de 600.000 firmas, solicitando que la “Fiesta Nacional” sea declarada de interés cultural. ¿Cómo se le puede llamar cultura a eso que los fanáticos van a ver a las plazas para gritar olé ante un fantasma que sólo piensa en la fama y el dinero? No entiendo qué es lo quieren ver. Si lo que desean es que el torero sea pinchado por el toro, eso quiere decir que son unos sanguinarios salvajes y microcéfalos.
Ayer también quedó demostrado que el Real Madrid no sabe perder y que se cree con el derecho de ganarlo todo, como durante la Dictadura. Pero si quieren ganarlo todo, que aprendan a jugar al fútbol y no sean tan bestias. Suerte tienen de pertenecer a un país dominado por los fanatismos más tontos y así nos va.

Síndrome de Down

Hoy es el Día Mundial del Síndrome de Down. En España tenemos una cantidad de afectados aproximada al número de subnormales que nos gobiernan a distintos niveles de las administraciones. Si me dieran a elegir, preferiría que nos gobernasen ellos y no los impresentables que elegimos de vez en cuando.
Estos días estamos comprobando como unos políticos corruptos van a la cárcel, terminadas las primeras declaraciones ante una preciosa jueza, y en cambio, hay otros ya condenados con más de cinco años, que tienen un sin fin de causas pendientes y de momento siguen libres. ¿Por qué esta diferenciación?
Hace unos días recibí un E-mail de un amigo, con una lista interminable de ciento veintisiete políticos de distinto sexo e ideología, que están imputados o ya sentenciados en procesos judiciales por corrupción y todos los chanchullos derivados de esa obsesiva actitud enfermiza que les hace pensar sólo en el dinero del contribuyente, como si no supieran que van a morirse tarde o temprano. Aunque eché de menos a otros cincuenta que ya pasaron a la historia y están disfrutando de los placeres de la vida con los millones que han robado. Pero cómo la Justicia va interesadamente lenta, tardaremos años en verles a todos ellos condenados: los más listos libres y los más tontos en prisión. La desgracia es que en España estos se multiplican cada día como las ratas y es la historia de nunca acabar; con lo que nunca nos veremos libres de esa lacra inmunda. ¡Qué vergüenza, qué escándalo y qué espectáculo indigno estamos dando ante el mundo democrático y civilizado!
El funcionamiento de los poderes establecidos en este país da verdadera pena: el Legislativo es demasiado lento, excepto cuando le interesan las prisas, y siempre va a remolque de la sociedad; el Judicial también es excesivamente lento y parece que sólo está al servicio de los más ricos, el Ejecutivo está totalmente manipulado por los que ostentan el poder económico y los medios de comunicación, que deberían denunciarlo todo cada día, están siempre al servicio del poder político y económico. Como con estos precedentes esto no hay quien lo arregle, repito que me gustaría que nos gobernasen las personas que sufren síndrome de Down, porque son más inteligentes y sensatos que los políticos. Pero como esto es imposible, hay otra alternativa: que nos gobiernen las mujeres. Si hay más que hombres y si son más inteligentes que nosotros, por qué no dan un paso adelante y se hacen valer. Tienen armas suficientes para dominar a los machos y dar el asalto al poder. Si las mujeres ostentaran el poder político, las negociaciones de paz a nivel global serían mucho más fáciles y efectivas y tendríamos la oportunidad de cambiar el mundo positivamente de una puñetera vez; sino estamos perdidos y caminamos sin remedio hacia la esclavitud global impuesta por los individuos más malditos e hijos de perra.

Viva la Pepa y viva el PP

Hace unos meses dije que Rajoy sería el peor Presidente que hemos tenido en democracia y ayer tuvo la desfachatez de demostrarlo en el acto parafernálico del bicentenario de la Constitución de Cádiz, donde intentó justificar sus ajustes y recortes, comparando una época con la otra. Sabemos que aquella Constitución duró pocos años y que lo más importante de la misma fue convertir a los súbditos en ciudadanos. En cambio, en la de 1978, se cometió el error de crear la España de las autonomías para uniformar las heterogéneas regiones, que no pegan ni con cola; con lo que se han multiplicado los cargos de políticos inútiles e innecesarios, lo que nos está conduciendo al desastre económico total. Con ella y gracias a la alternancia en el poder de partidos como el PP, estamos llegando a una situación laboral inadmisible, retrocediendo décadas en los derechos sociales conseguidos tras la Dictadura.
No hace muchos años decía Rajoy que le gustaría formar un Gobierno eficaz como el de Matas en Baleares. ¿Y qué dirá hoy, cuando su amigo ha sido condenado a seis años por varios delitos? Dirá que ya no es militante del partido y tal y tal. Es una vergüenza lo que pasa en este país con los corruptos. No me extrañaría que dentro de unos años, cuando finalicen la veintena de juicios que tiene pendientes, encima se quede libre y no devuelva ni un euro de todo lo que robó. Tienen todos tan poca dignidad y la cara tan dura que hasta da asco ser español.
Comparando los políticos de principios del siglo XIX y los de la Transición con los actuales, éstos dan verdadera pena; pero la culpa es que quienes les votan. Precisamente el domingo, Rajoy verá respaldada sus políticas antisociales en Andalucía y encima se reirán de nosotros; quienes tendremos que recordar la famosa frase de Castelao, “Mexan por un e hay que decir que chove”. ¡Tenemos lo que merecemos, por tontos!

Valencia

Nunca me cansaré de repetir que España es un país raro, atípico y diferente. Está lleno de políticos corruptos, de fanatismos nacionales y nacionalistas, terroristas, religiosos, futboleros, taurinos y festivaleros de toda índole.
Nuestra geografía está atiborrada de todo tipo de fiestas, para conservar las tradiciones y las costumbres históricas y otras que no lo son tanto. Pero la que más me llama la atención y debe dejar alucinados a los ciudadanos del Tercer Mundo y a los de los países más cultos, son las Fallas de Valencia. Hay que ver la millonada que funden en mascletás y el despilfarro de miles de horas de trabajo de miles de personas, que dedican todo el año a crear más de setecientas verdaderas obras de arte para quemarlas en diez minutos; dejando con la boca abierta a los bobalicones que van a verlas.
Con la que está cayendo, flipo con lo que ocurre en este país, especialmente en la Comunidad Valenciana; conocida y famosa por dilapidar miles de millones de euros en la celebración de variados eventos y en la construcción de obras y mamotretos públicos fantasmagóricos como Tierra Mítica o el aeropuerto de Castellón. No entiendo cómo no están en la cárcel los políticos corruptos que han realizado todas estas aberraciones. Eso es gracias a la justicia que nos toca sufrir.

Andaluces

Cuando me vine a Catalunya en 1965 para trabajar en la construcción, conocí personalmente a los primeros andaluces y me hacían mucha gracia; no porque fuesen graciosos por naturaleza, sino porque se creían más listos que nadie y pensaban que todos los gallegos éramos tontos. De aquella época recuerdo larguísimas conversaciones con señores que habían pasado muchas calamidades, antes, durante y después de la Guerra Civil. Me contaban historias increíbles de señoritos que se creían dioses y abusaban sexualmente de las hijas y las mujeres aún jóvenes de los jornaleros, si estos querían trabajar. No sabía si creerles, pero todo era posible, porque aquello me recordaba las acciones de sus primos hermanos, los caciques gallegos.
Ahora Andalucía está en una encrucijada. El próximo domingo celebran elecciones y los electores pueden meter la pata si le dan la mayoría absoluta al Partido Popular, porque no se la merecen, especialmente el impresentable Arenas. Tampoco se la merecen los socialistas, por permitir tanta corrupción y tantísimo enchufismo durante treinta años. Lo positivo sería que sumasen mayoría el PSOE e IU, pues con éstos en el Gobierno no habría tanto desmadre y las cosas podrían comenzar a funcionar en aquella comunidad. Espero que no se repita lo de Extremadura.
En el caso de que el PP obtenga mayoría suficiente para gobernar, que no se equivoquen, porque la juventud actual no tiene nada que ver con la sumisa del franquismo. Está más preparada y es más culta, especialmente las chicas. Ya se habituaron a la libertad de forma irreversible y si allí la derecha y los señoritos quieren volver a las andadas es porque también tragarían en el resto del país, en este verdadero retorno a la esclavitud. Nuestra juventud, por suerte, gracias a la educación universal y gratuita, se ha uniformado mucho en todo el territorio nacional y ya no difiere una de otra aunque viva en comunidades tan diferentes como las del norte y las del sur.
Lástima que nadie creíble pueda decirles a todos los andaluces lo que les espera. Pero si gana la derecha, como no hay bien que por mal no venga y como sarna con gusto no pica, luego reaccionarán enérgicamente y espero que entonces contagien al resto del país ante esta situación tan dramática y lamentable.

Ayer he visto una entrevista a Joan Ridao en el canal 24 Horas y me pregunto por qué los políticos más lúcidos y preparados tienen que abandonar la política. Con los tontos que nos gobiernan actualmente no podemos ir a ninguna parte, por desgracia.

Madrid o Barcelona

Personalmente pienso que Madrid se llevará el gato al agua en el tema de la instalación del bodrio de Eurovegas. ¿Por qué? Porque Madrid es la capital del antiguo imperio y tiene allí concentradas las oficinas centrales de las más importantes empresas nacionales y multinacionales, la bolsa y los bancos, la chusma política, los funcionarios de casi doscientas embajadas y todos los ministerios, los trabajadores de un sin fin de medios de comunicación, una considerable cantidad de pueblos en la periferia, cuya renta per cápita supera el doble del resto de los cristianos, un aeropuerto realmente internacional y una red ferroviaria, de autovías y de carreteras radiales que la hacen ser una capital privilegiada. De nada de esto puede presumir Barcelona, aunque cuente con un puerto de mar muy importante, pero la zona metropolitana está de llena de ciudades y pueblos que ya son considerados cementerios de almas vivientes e industrias desmanteladas, como las textiles. También debemos tener en cuenta que en los últimos años, desde que los cruceros se han masificado, los que tienen mucho poder económico ya son minoría en los mismos, porque no les gusta el aborregamiento ni soportar durante semanas las tertulias insustanciales de gente inculta y vulgar. Además, si tenemos que importar la mayoría de la energía que consumimos y hemos tenido que construir varias potabilizadoras, para paliar los efectos de las sequías que se irremediablemente se avecinan, pienso que ellos deberían producir la energía necesaria para su auto consumo y potabilizar agua del mar o las residuales del Llobregat; pues los millones de inversión en esos servicios deben ser destinados a la población que los ha pagado con sus impuestos. ¿O no? Por lo tanto, estoy seguro que ese anciano que quiere ser el más rico del cementerio y nos ofrece el oro y el moro, seleccionará a Madrid. Sólo espero que las autoridades correspondientes no toleren el libertinaje total, el desmadre fiscal, la pérdida de derechos de los trabajadores contratados y que a la comunidad elegida no le ocurra lo mismo que al estado norteamericano donde están ubicadas las “alucinantes” Vegas; que hoy por hoy es donde hay más pobreza, más desempleo, más delincuencia, más asesinatos, más miseria, más prostitución y más droga y alcoholismo que en ningún otro.
Hay que ser políticos subnormales para dejarse engañar. Si lo hacen es porque piensan sacar tajada con la construcción de las edificaciones, calles y accesos, que de eso saben un rato, por eso estamos sufriendo ahora el efecto del ladrillazo. Luego trabajarán allí 2 ó 300.000 trabajadores, que es más o menos el 5 % de los parados que tenemos ahora; algo es algo. ¡Viva el segundo Plan Marshal!

Huelgas importantes

Cuando la economía española crecía más que en el resto de la historia del país, los sindicatos convocaron una huelga general al gobierno de Felipe González. Transcurría el año 1988, en la segunda legislatura socialista, más o menos a los seis años de mandato. El mismo tiempo transcurrió para que volvieran a convocar otra importante huelga al gobierno de Aznar y se repitió la historia con Zapatero un año antes de que abandonara el poder. Pero a Rajoy, como es el mejor de todos y hace todo lo contrario de lo que prometió en la campaña electoral, no han esperado seis años, ni siquiera seis meses, sino cuatro.
El 29 de marzo debería ser la huelga más importante de la historia de España y deberían paralizarse hasta los más trabajadores, aunque crean que tienen su puesto de trabajo seguro, porque en ninguna de las huelgas anteriores las cosas estaban tan mal como en estos momentos.
Sólo tengo la esperanza de que si los populares ganan las elecciones en Andalucía, sea precisamente en esa región sureña donde los trabajadores comiencen a reaccionar inmediatamente contra las medidas antisociales de la derecha y que contagien al resto del país, sino estaremos perdidos y abocados a retornar a épocas peores que en tiempos de la esclavitud o el feudalismo, donde los señoritos de ahora son los banqueros, los políticos y los que no saben que hacer con el dinero. Serán hijos de la gran puta.

Escándalo político europeo

Después de dos semanas de paréntesis por problemas técnicos y de tiempo, vuelvo al ataque porque ya estoy harto de los políticos y de las madres que parieron a semejantes individuos. Llevamos ya varios años sufriendo la ineficacia de los políticos europeos, que no saben cómo sacarnos del atolladero en que nos han metido, sobre todo los españoles, que son porcentualmente los más corruptos.
Durante mi ingenua juventud imaginaba que las mejores personas y espíritus más preparados participarían en esto que más bien parece una conspiración para favorecer desde la política a los mismos de siempre y a verdaderos gobiernos en la sombra, porque los actuales gobernantes son de la peor calaña desde tiempos inmemoriales. Estamos dirigidos y gobernados por aficionados y personas de segundo orden al dictado de poderes fácticos de todo tipo. Los métodos que utilizan en nuestras administraciones llevarían a la quiebra a cualquier empresa particular y los métodos de los parlamentos avergonzarían a cualquier junta de accionistas. Nuestros políticos simulan adquirir el saber por la experiencia, pero están lejos de ponerle el precio que pagaría un hombre de negocios por ellos. No tiene ningún sentido ni atractivo para un hombre genial vender su cerebro a nuestros malos gobernantes, por eso se van fuera, donde son mejor pagados. En Cambio, cuando abandonan la política les enchufan en consejos de administración de distintas empresas, tanto públicas como privadas, para que especulen todo lo posible en negocios montados para enriquecer a sus mangantes y no para servir a la sociedad de la cual viven; porque especular y robar es lo único que han aprendido en su paso por la política.
¿Por qué somos tan desgraciados y no tratamos de hacer algo que ponga fin a este desmadre político? ¿Qué hemos hecho para merecer esto?