Directores y entrenadores

Yo tengo la teoría de que la Orquesta Filarmónica de Londres o cualquier otra orquesta sinfónica importante, si tuvieran que interpretar sin director una gran ópera de Rossini o una sinfonía de Beethoven, lo harían de manera magistral, poniéndonos el bello de punta. En cambio, si la orquesta de mi pueblo fuese dirigida por Von Karajan en su día o por Zubi Metha, sonaría fatal y nos haría salir corriendo de la sala de audición.

Con los entrenadores de fútbol y otros deportes colectivos pasa exactamente lo mismo. El año pasado Josep Guardiola demostró ser el mejor y sigue siéndolo en la actualidad, a pesar de llevarse el último galardón el más chulo de todos. Realmente el morito se lo merecía por los resultados de su anterior equipo en Italia, pero en el actual Real Madrid creo que se va a comer una KK y no la de Kaká precisamente. Es tan narcisista que no se besa porque no puede y por lo visto hoy en las noticias, estoy seguro que si hubiese un premio al entrenador más polémico se lo ganaría a pulso sin lugar a dudas. No tiene nada que ver con el talante, la humildad y la inteligencia de Pep, que ha logrado un equipo que ni siquiera necesita entrenador. Sino que hagan la prueba. Que les dejen jugar a su aire un partido sin directrices de ningún tipo y nos demostrarían que lo más importante en un equipo es la plantilla y no el entrenador, ni mucho menos el presidente del club y todos los chupópteros que tiene alrededor lamiéndole el culete, porque en el Real Madrid se están pasando cuatro pueblos con tanto despilfarro de millones, con la que está cayendo en el país. Me gustaría ver qué haría Mourinho entrenando a un equipo de la cola de la tabla. Con buena herramienta cualquiera trabaja, decía el otro.

¡Qué lástima que haya tanto tontaina en el país que se desviva por el aburrido fútbol!

CONSTANTE