miércoles, 4 de enero de 2012

Agoreros

Llevamos cuatro días del nuevo año y aún no he visto ni oído una buena noticia, cuando mañana nos esperan muchas aún peores después del Consejo de Ministros. Como en este país somos muy agoreros todos pensamos que este año será peor que los anteriores, aseguran algunos porque es bisiesto. ¿Qué importará que tengamos un día más para sufrir? Eso es confundir el tocino con la velocidad.
Pues bien, si el 2012 será malo, que dirán en el próximo los supersticiosos que sólo tienen la cabeza para llevar sombrero o gorra o para darle trabajo a los peluqueros. Estos años y los siguientes serán aún más negativos porque no hay justicia. Hace unos lustros dijo el alcalde de Jerez que la justicia en España era un cachondeo y no iba desencaminado, algo que bebía haber hecho extensivo a todo el mundo, porque los que nos han llevado a la ruina total deberían estar en la cárcel, acompañando, entre otros, a los miles de desgraciados que han tenido que robar para poder subsistir. ¿Cómo es posible que varios miles de hijos de perra quieran apoderarse de todas las riquezas de la Tierra y que el resto estemos viéndolas venir sin reaccionar?
Sabemos por qué han fracasado el comunismo y el capitalismo, pero aunque incluso los más ignorantes se crean expertos en buscar soluciones para la crisis, no hay forma de salir de este atolladero, porque nadie hace caso a los que tienen ideas geniales y contundentes, pues a ellos sólo les interesa el maldito dinero a corto plazo y por encima de todas las cosas. Por lo tanto, creo que ha llegando el momento de pasar a la acción y aplicar la justicia como en los tiempos primitivos: aquí te pillo y aquí te mato, porque el que la hace la paga; sino lo pasaremos muy mal. Ya van más de 2.000 años desde que se inventó la democracia y si los tres poderes que la componen no funcionan, o solamente funcionan para favorecer siempre los mismos, algo habrá que hacer.
Es acojonante ver como los ricos y los políticos se ríen de la ciudadanía, importándoles todo una mierda, mientras ellos viven sin problemas en su mundo ideal de despilfarro y orgías de todo tipo.
Mañana más y que tengáis muchos regalos, pero si vuestros hijos no los necesitan se los podéis enviar a los retoños de Urdanguarrín, que a lo peor no tienen con qué comprarlos. ¡Viva la globalización de la estupidez humana!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Más información en http://www.irisfanclub.com