Ayer en una cena con gallegos pude ver un titular en
Lo que tienen que hacer todas las administraciones del Estado es no perder el tiempo enviando cartas de apercebimiento y descontarles del salario las horas perdidas por el morro, sin justificación. ¿Para qué tenemos tantos privilegios los funcionarios si no los merecemos? Con razón la mayoría de los estudiantes gallegos al terminar los estudios medios o superiores siguen preparándose para oposiciones, a lo que sea, con tal de asegurarse un sueldo seguro para toda la vida, si es imposible emplear a tantos vagos en las administraciones públicas, porque alguien tiene que trabajar queridos paisanos.
Todos sabemos que sobran entre un 30 y un 40% de los funcionarios en distintas administraciones, bien porque han sido enchufados por los partidos que gobiernan o porque debido el poco interés que ponen en su cometido, se necesita más personal.
Ahora con el recorte del salario a los funcionarios, deberían ponerse todos en huelga para reventar de una vez por todas a los políticos que nos han conducido a esta crisis brutal y no se atreven a castigar fiscalmente a las grandes fortunas, para subsanar el déficit público y el endeudamiento. ¿Por qué tienen que pagar los platos rotos los desgraciados de siempre? Si los funcionarios no reaccionan enérgicamente, no será porque tienen remordimiento de conciencia y reconocen que no merecen lo que cobran. El que no gana lo que le pagan, no vale lo que le pagan. Esto lo dice un funcionario con treinta años de servicio, que faltó al trabajo sólo seis días de Sant Jordi, que coincidieron en jornada laboral.
Tengo curiosidad por saber cómo reaccionarán los funcionarios y la clase trabajadora el día 12 de junio en la manifestación que han convocado los sindicatos. Aunque sólo fuese un poco, me gustaría que imitásemos a los franceses. No me extrañaría que también se unieran a ella votantes del Partido Popular y
Siento que debido a la ineptitud de la clase política, tengamos en España el 40% de la población obesa y que ahora haya muchas, demasiadas familias que pasan hambre y necesidades. ¿Cuándo vamos a reaccionar? Si hasta un tonto sabe qué hay que hacer para salir de la crisis.
CONSTANTE
Bueno amigo bloguerito, se ve que estás un poco cansado de todo, igual que estamos todos. Pero la solución comienza por quitar de enmedio a los que sobran por el artículo 33. Luego que vengan los y las que valen que haylos y haylas, y que se pongan a trabajar por el país. Si los que creen que arruinando a España la Catalunya independiente lo será antes, están bastante equivocados. El espectáculo indecente del Montila yendo al Senado a quejarse es patético, y además de no servir para nada, es lo peor que puede hacer para quemar la última brizna de decencia que podía tener. Si con este acto cree que le van a salvar sus enemigos de CiU está muy equivocado. Madrid no es la "casa nostra", allí se rien de nosotros y hoy se reirán a mandibula batiente del pequeño de Iznajar, llevado allí por sus palmeros.
ResponderEliminarEn fin, bloguerillo de mis entretelas, pasar4án estos días pésimos, otros vendrán peores y cuando el personal ya esté harto, entonces, cuando el capital quiera y no antes, aparecerán medias soluciones a medias tintas, pero dejando en la boca el amargo sabor de la impotencia.
Amigo bloguerillo: Creo que las soluciones que apuntas van en la dirección del contenido que sigue:
ResponderEliminarHa dicho la Vicepresidenta del gobierno que es indecente que mientras la inflación es -1%, y tengamos más de 4.000.000 de parados, haya gente que no este de acuerdo en alargar la jubilación a los 70 años.
Me gustaría transmitirle a esta Sra. Vicepresidenta y a todos los políticos lo que yo considero indecente.
INDECENTE, es que el salario mínimo de un trabajador sea de 624 ¤/mes y el de un diputado de 3.996, pudiendo llegar, con dietas y otras prebendas, a 6.500 ¤/mes.
INDECENTE, es que un profesor, un maestro, un catedrático de universidad o un cirujano de la sanidad pública, ganen menos que el concejal de festejos de un ayuntamiento de tercera.
INDECENTE, es que los políticos se suban sus retribuciones en el porcentaje que les apetezca (siempre por unanimidad, por supuesto, y al inicio de la legislatura).
INDECENTE, es comparar la jubilación de un diputado con la de una viuda.
INDECENTE, es que un ciudadano tenga que cotizar 35 años para percibir una jubilación y a los diputados les baste sólo con siete, y que los miembros del gobierno, para cobrar la pensión máxima, sólo necesiten jurar el cargo.
INDECENTE, es que los diputados sean los únicos trabajadores (¿?) de este país que están exentos de tributar un tercio de su sueldo del IRPF.
INDECENTE, es colocar en la administración a miles de asesores (léase amigotes con sueldo) que ya desearían los técnicos más cualificados.
INDECENTE, es el ingente dinero destinado a sostener a los partidos, aprobados por los mismos políticos que viven de ellos.
INDECENTE, es que a un político no se le exija superar una mínima prueba de capacidad para ejercer su cargo (y no digamos intelectual o cultural).
INDECENTE, es el coste que representa para los ciudadanos sus comidas, coches oficiales, chóferes, viajes (siempre en gran clase) y tarjetas de crédito por doquier.
INDECENTE, es que sus señorías tengan seis meses de vacaciones al año.
INDECENTE, es que sus señorías, cuando cesan en el cargo, tengan un colchón del 80% del sueldo durante 18 meses.
INDECENTE, es que ex ministros, ex secretarios de estado y altos cargos de la política, cuando cesan, son los únicos ciudadanos de este país que pueden legalmente percibir dos salarios del erario público.
INDECENTE, es que se utilice a los medios de comunicación para transmitir a la sociedad que los funcionarios sólo representan un coste para el bolsillo de los ciudadanos.
INDECENTE, es que hablen de prolongar la edad de jubilación cuando acortarla daría puestos de trabajo a los jóvenes que ven marchitada la flor de su vida en las colas del INEM.
INDECENTE, es que nos oculten sus privilegios mientras vuelven a la sociedad contra quienes de verdad les sirven.
¿Y mientras, hablan de política social y derechos sociales?
¡¡QUÉ INDECENTE!!
Uno de los 6 que escriben en tu amado blog, viva la libertad.