Como la gran verdad es que todo es mentira, ya no creo casi nada de lo que dicen los medios de comunicación. Todo funciona a base de encuestas, sondeos, barómetros y estadísticas, que siempre benefician a quienes las pagan.
Hoy nos dijo el CIS que el Presidente del Gobierno no aprueba. Detrás le sigue una señora que dice lo que los ciudadanos quieren oír, porque una cosa es predicar y otra muy distinta dar trigo, sabiendo que no va a ser nunca Presidenta. A continuación está el que le gustaría ser ministro y que debería haberlo sido, para que Zapatero tuviese los apoyos suficientes en el Congreso. En cuarto lugar aparece el sempiterno aspirante, cuya confianza de los “españolesh” está a ras de suelo, peor que la del Presidente; lo que me da mala espina y pienso que le cambiarán en el momento oportuno. En cuanto ganen las elecciones europeas por culpa de la abstención de las fuerzas de izquierdas, se pasarán año y medio pidiendo la anticipación de la generales, hasta que lo consigan.
En uno de los apartados del barómetro, plantearon mal las preguntas, porque no creo que la vivienda esté al final de las preocupaciones de los españoles, por detrás de la inmigración y el terrorismo de ETA. La encabezan el paro y los problemas económicos, pero pienso que la vivienda debería estar en segundo lugar, pues es muy triste que la mayoría de la juventud del país, especialmente de Catalunya, tenga que hipotecarse para toda la vida, por una vivienda que vale cuatro veces menos. Treinta años de Constitución que reconoce el derecho a una vivienda digna y el derecho al trabajo y al final, ni chicha ni limonada, sino todo lo contrario: paciencia y resignación.
Lo único que nos falta a los españoles es que se presente a las elecciones generales el señor Milio Botini, que le votemos mayoritariamente y ejerza su poder omnímodo, como el Cavalieri en Italia.
CONSTANTE
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Más información en http://www.irisfanclub.com