Martes y trece

Hoy es un día malo para los supersticiosos, pero no tiene por qué serlo. En cambio, para los americanos es el viernes y trece. Menudas tonterías para quienes reflexionan.
La suerte individual de una persona depende en primer lugar de que un espermatozoide fecunde en un óvulo y para eso tiene que haber normalmente dos personas, sino no existiríamos; lo que puede ser una suerte o una desgracia. Si esa pareja tiene buena salud, educación y no le faltan los elementos mínimos para sobrevivir holgadamente, su retoño tiene muchas posibilidades de ser una persona con suerte, pero también depende de él si elige el buen camino y no los tortuosos que sólo conducen al desastre y al caos. No depende del azar ni mucho menos, sino de si sabe lo que quiere y no pierde el tiempo en bobadas.

Por ejemplo: ayer fue un mal día para Zapatero, debido al abucheo recibido antes de comenzar el desfile de las Fuerzas Armadas, cuando se constató que una ínfima parte de este pueblo no tiene educación y mea fuera de tiesto cada vez que tiene ocasión. Me remito a las palabras de Albertito Gallardón. ¿Por qué no abuchearon a la Familia Real? En cambio, hoy es un día maravilloso para nuestro presidente, porque fue recibido en la Casa Blanca por el dios negro, al que muchos envidian desde que le concedieron del Nóbel de la Paz. Ya era hora de que se normalizara la situación entre los presidentes de los dos países, después de que el anterior fantasma colocara sus zapatos sobre la mesa de centro del rancho de Bush, mientras fumaban puros habanos. Ya veremos si los frutos de esta entrevista de Zapatero con Obama y estas reuniones bilaterales darán sus frutos y servirán para algo positivo o si son sólo para salir en la foto, algo con lo que sueñan todos los vanidosos del mundo.

Por el contrario, hoy fue un mal día para Rocardito Costa, porque han intentado convencerle de que le apartaban del cargo temporalmente; con lo que ya puede ir haciéndose a la idea de que será algo definitivo. Se lo merece por garrulo y por chulo. Es curioso que en Valencia digan que continúa como Secretario General y portavoz parlamentario mientras no se investigue y en Madrid digan todo lo contrario. El objetivo es marear la perdiz y que todo quede en agua de borrajas, como todo lo que hacen, librándose casi siempre de la justicia. Estaríamos apañados si todos los políticos fuesen como él y sus amigotes de la trama Gürtel.

También escuché en las noticias que un imbécil quiere hacernos creer que la mala suerte de Cristiano Ronaldo se debe a sus prácticas de vudú. Los que le pagan por eso son tan idiotas como él, que se aprovecha de la caña que le meten al futbolista en el campo y se lo atribuye a sí mismo, cuando no es verdad. El caso es que a partir de ahora ese gilipollas se forrará, porque cada día que pasa hay más ignorantes e incautos que recurren a estúpidos como él. Somos los animales más manipulables y así no podemos ir a ninguna parte. Y luego nos quejamos de los políticos inútiles que nos gobiernan, si somos tontos e ingobernables.

CONSTANTE