Feliz castañada

Antiguamente celebraban el día de difuntos cenando productos de la época otoñal toda la familia unida, para recordar a quienes les habían abandonado. Pero con tanta modernidad, tanta libertad y tanto desmadre, las familias ya no son lo que eran, las tradiciones se van perdiendo y hemos pegado un gran castañazo. Muchas familias se desintegran, un alto porcentaje de la juventud en vez de reunirse con sus seres queridos en torno a la mesa, se aborrega en macrobotellones y con el porro y así nos luce el pelo; retrocediendo en cultura como en ninguna otra época de la historia, a pesar de tener más oportunidades que nunca para estudiar y sea obligatoria la educación. Todo, porque la cultura nos persigue, pero nosotros somos más rápidos. Así no podemos ir a ninguna parte y merecemos todo lo que nos hacen sufrir los poderes fácticos.
Desde mediados del siglo pasado, paralelamente al Plan Marshal, los americanos nos han ido imponiendo sus productos y sus costumbres: películas del oeste, pantalones vaqueros, colas desatascadoras de tuberías que nos arruinan la salud; comida basura, no se sabe de qué, consiguiendo que el 40% de nuestra población sea obesa y enferme, además de tradiciones de toda índole.
Al día de hoy ya se le llama Halloween aquí también, porque la mayoría de las familias ya no quieren recordar a sus muertos y entran en la dinámica que nos imponen los medios de comunicación manipuladores de masas.
Menos mal que no todo lo americano es negativo, pues paralelamente a esta imposición y desmadre, hemos disfrutado de su maravilloso Rock & Roll, del Jazz y todas sus variantes, de algunas películas impresionantes, gracias a inversiones multimillonarias y de varias series de televisión bastante aceptables, las cuales se quieren imitar aquí sin demasiada suerte, porque no resultan creíbles por falta de originalidad y de inversión.
Como ya todo se ha globalizado: la economía, que sólo favorece a los megarricos y la contaminación, que provoca el inminente y desastroso cambio climático, globalicemos también la estupidez humana y seamos felices. ¡Felicidades en el día de todos los santos y siempre!

CONSTANTE