Adiós José Luis

Hoy le decimos adiós a uno de los mejores actores españoles. Un monstruo de la interpretación, con setenta años de actividad artística y más de doscientas películas, a una media de tres por año; además de otras actividades teatrales, lúdicas y culturales.
Como buen cinéfilo en mi juventud, cuando iba a sesiones continuas era difícil no encontrar en cartel una película suya, de Alfredo Panza, Esteso y Pajares o Martínez Soria. Era lo que había, aparte de tropocientas mil películas americanas.
No me imagino a los guionistas escribiendo el 100% de la verborrea que este actor soltaba en la mayoría de sus películas. También creo que los directores le dejaban actuar, improvisando a su manera tan característica, como lo hacían John Waine, Marlon Brando o Charlton Heston, que no se dejaban dirigir y pretendían ser siempre ellos mismos. Estoy seguro que si José Luis fuese americano habría recibido más de un Óscar por su grandiosa carrera y una que otra interpretación dramática magistral.
Lo que no entiendo, es que haya trabajado toda su vida y no haya muerto multimillonario, a juzgar por lo que decía hace unos años: “Si no trabajas no comes”, y andaba mendigando trabajo, cuando su época ya había quedado desfasada con tanta modernidad y tanto mariconeo.
Recordado como cómico, hay que reconocer que bordaba magistralmente cualquier trabajo dramático, algo que no logran otros actores mucho más chulos que él, que se forran con unas cuantas películas insoportables y pasan a la historia.
Gracias José Luis por ser tan bueno. Eres un ejemplo de profesionalidad y dedicación y no morirás nunca, porque permanecerás en nuestras mentes hasta que la civilización deje de tener recuerdos. Ya eres inmortal y eso es la Gloria.

CONSTANTE