La líder del PP

Conocidas las trayectorias de todos los líderes de AP y del PP en los últimos treinta años y vistas las caras de los actuales, he llegado a la conclusión de cómo debe ser el líder que necesitan para triunfar.
Hace unos años, Rajoy dijo que Zapatero era un bobo solemne y como también él lo es, no merece ser Presidente del Gobierno. Esperanza Aguirre, con su ambición desmesurada, está cavando su propia tumba y no tendrá ninguna posibilidad de alcanzar ese deseado cargo. Camps se ha ahogado a sí mismo con sus mentiras y ya no tiene nada qué hacer, por mucho que le voten los fachas valencianos. Ruiz-Gallardón, el gran endeudador de Madrid, tampoco reúne las condiciones necesarias, por mucho que sea hijo de papá y se crea y crean que es el mejor. Aznar, por suerte para todos, ya pasó a la historia, aunque sueñe con su retorno triunfal a los tiempos del Hombre de Cromagnon. Rato va de listo forrándose con los suculentos sueldos que tiene actualmente y no creo que le interese optar a la presidencia del Gobierno cuando España está en bancarrota; todo lo contrario que cuando Aznar llegó al poder y propició el caos actual.
Viendo y escuchando estos días las voces del amo Rajoy o Rajob: Soraya Sáenz de Santamaría, la del rostro adorable, que incomprensiblemente irradia cinismo en vez de bondad y el lujurioso cuerpo de María Dolores de Cospedal, que es más de lo mismo, creo que se debería hacer una simbiosis con la cabeza de la primera y el cuerpo de la segunda; pero hay un problema: sería una mujer nueva y físicamente soberbia, a la que habría que transplantarle el cerebro para que fuese perfecta. Y analizando a todas las mujeres importantes de su partido, sólo se me ocurre que sería perfecto el de Montserrat Nebrera, pero ya no está en el partido y también es imposible científicamente, si no contamos con un nieto de Frankenstein para que realice el prodigio. ¿Os imagináis a la mujer más deseada del mundo presidiendo el Gobierno de España? Hasta incluso yo la votaría si lo que propongo fuese posible. De esa manera, el PP se equipararía a la más que justa paridad del PSOE, ya que con más mujeres controlando la política, seguramente no habría tanta corrupción ni tanta crispación.
Me pregunto por qué los hijos de la gran puta, que lo manipulan todo, no dejan que las mujeres asuman los altos cargos de responsabilidad, siento tan o más válidas que ellos.

CONSTANTE