Malas noticias

ETA intentó matar de nuevo, esta vez en Burgos, porque es demasiado fácil poner bombas o disparar en la nuca y por la espalda, sin mirar a los ojos. Como dicen los creyentes, gracias a Dios, sólo causó grandes desperfectos en edificios y coches; pero ¿os imagináis la conmoción mundial que causaría si hubieran fallecido muchas personas, incluidos los niños que dormían a aquellas horas?
ETA lleva medio siglo intentando atemorizar a la población y coaccionar al Estado, pero no lo conseguirán, porque ya estamos hartos de tanta barbarie y tenemos que reaccionar todos contra esos desalmados inhumanos y contra quienes les jalean y apoyan. En cuanto quitaran del medio a unos cuantos centenares de criminales que están dispuestos asumir la responsabilidad de dirigir la banda terrorista, se acabaría la rabia y el mal, de raíz y para siempre.
El objetivo principal de esos asesinos es lograr la independencia de Euskalerría, pero ya se pueden ir olvidando de ese tema, porque no lo conseguirán nunca.
Por culpa de ETA, Euskadi está costando demasiado al Estado. Gracias a sus fueros y en parte a ella, los vascos tienen demasiados privilegios, sobre todo fiscalmente. Esa lacra inmunda está provocando unos gastos descomunales en seguridad, siendo ese territorio el único del mundo donde los demócratas tienen que llevar escolta. No quiero ni saber cuánto cuesta la reconstrucción de los edificios y las instalaciones dañadas por los atentados, en seguros e indemnizaciones y en mantener a miles de criminales en las cárceles a cuerpo de rey, como en hoteles de cinco estrellas, porque sino dicen que les torturan. Parece ser que ellos tienen más derechos que las víctimas; pero lo peor de todo es el sufrimiento que producen a los que quedan heridos y el de todos los familiares que han sufrido las causas de su maldita locura.
Ya va siendo hora de acabar con ellos de una vez por todas y si no son suficientes las fuerzas de seguridad, que recurran al ejército. No entiendo por qué se tiene que ir a poner orden donde hay conflictos por todo el mundo y permiten aquí esta lacra inmunda que lleva ya demasiado tiempo machacando a inocentes, para nada. España sin Euskadi no estaría ahora arruinada ni en bancarrota. Tenemos que agradecer a la gendarmería francesa y a sus autoridades su colaboración en la detención de gran parte de esos criminales; pues de lo contrario no habría forma de acabar con ellos.

La otra noticia que me saca de quicio y me indigna, es que el señor Milio Botini salga alardeando como cada trimestre, restregándonos en las narices que es el rey del mambo y que gana más dinero que nadie, con más de 4.500 millones de beneficios en un semestre. Por culpa de quien se lo permite, y no señalo a nadie, están hipotecadas para toda la vida la mayoría de las parejas jóvenes del país. No hay derecho que vivamos permanentemente bajo esta ley del embudo sin que nadie reaccione. En mi vida he visto a un pueblo tan pacífico que traga lo que le echen sin rechistar. Si la juventud de hace 73 años fuese como la de hoy en día no se hubiese disparado ni un solo tiro y no habría habido guerra. ¡Cobardes y mamones, estoy de vosotros hasta los cojones! Seguid mamando y drogándoos.

CONSTANTE