Cambio en Euskadi.

¡Por fin! ¡Por fin el cambio en Euskadi! ¡Ya era hora, después de casi treinta años! ¿Qué será de los vascos ahora sin el señor Ibarreche?
Enhorabuena al señor López, por la oportunidad que le brindan para gobernar, y al pueblo vasco por liberarse de la clase política que quería perpetuarse en el poder al estilo del PRI mexicano y erigirse en los salvadores vitalicios de ese país tan especial.
Estuvieron demasiado tiempo aprovechándose de la situación conflictiva provocada por ETA y de sus fueros, para obtener todos los privilegios fiscales y eso se tiene que acabar: o todos moros o todos cristianos. Euskadi le está costando demasiado al Estado y no se beneficia de él en absoluto, sino todo lo contrario. En ninguna parte del mundo se dedica tanto presupuesto a seguridad y es inconcebible en democracia que todas las personas importantes "enemigas" de los terroristas tengan que ir con escolta de seguridad. ¿Sabéis cuánto cuesta eso? Yo ni quiero saberlo, porque me pondría enfermo.
Allí puede triunfar en el gobierno cualquier partido político que tenga los apoyos parlamentarios suficientes para la embestidura, aunque esté en minoría, porque no tienen problemas de financiación como en Catalunya. No han de mendigar nada a Madrid y eso se nota en su nivel de vida, en sus salarios, que superan los del resto del Estado en 5 ó 6000 € anuales, y en todo lo demás; por eso notarán menos la crisis que nos azota globalmente.
Si hubieran acabado con ETA durante la Transición, Euskadi sería el territorio fiscalmente más privilegiado del mundo, al recaudar directamente casi todos los impuestos.
Si se creían tan diferentes y especiales, ¿por qué no construyeron en sus fronteras una muralla como la de Gaza? Han tenido tiempo suficiente. Espero que ahora se les quiten los humos del independentismo y no se crean los dueños de aquel territorio, como si fuese su cortijo privado.
Catalunya sí que necesitaría la independencia para poder levantar cabeza, porque con la sangría de nuestro déficit fiscal, que ronda el 9%, y la falta de financiación no hay economía que lo resista y no podrá recuperarse nunca. Es una desgracia que los jóvenes catalanes estén hipotecados para toda la vida y la mayoría ya no pueda ni tener descendencia si no cuenta con la ayuda de los padres. Es una vergüenza que un país tan acogedor y laborioso como el nuestro tenga que soportar esto y vivir totalmente resignados. ¿De quién es la culpa?
CONSTANTE